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EL IRIS

nestos al individuo y á la sociedad tierna devoción, y hasta morir, si fue-

misma, cuando noseajustan sus exi- re preciso, para confesarlo ante los

gencias al cumplimiento del deber,de hombres.

la conciencia y de la moral. Por eso Y ¿sabes quién eseste Señor que sin
urge que enla enseñanza se inculquen dejar deestar enlos cielos, está entre
ideas morales y religiosas. Así el hom- nosotros, sin que las continuas ingra-
bre nosehará esclavo del error, ni su titudes del hombre sean bastantes para
inteligencia caerá en los delirios del ausentarse de ella?
paganismo moderno.
Aviva tu fé, que es luz divina que
R. A. alumbra á todo hombre que viene al

Cartas epistolares. mundo, y descúbrele en Belén, al na-

cer, sinmas cama que un pobre pese-

bre, sin másregazo que los brazos de
ADELA Á SU HIJA LUISA. una Virgen-Madre, sinmas corte que

unos animales, sinmas aire que respi-
'- La primera Comunión.—Salagos jlel mundo. rar que él que la presta una atmósfera

fria y destemplada. Su nacimiento obe-

Mi querida Luisa: No cumpliera el dece á una gran misión, misión subli-
deber de madre católica, y, como á tal me, nocomprendida por los hombres,

mi conciencia no gozara decompleta la que debia remover al mundo social,
tranquilidad, si al prepararte tus direc-
tores espirituales para el gran diade hundido en las nebulosidades del pa-

ganismo. >

tu primera comunión, dejara de hacer- Y á ese Niño-Dios es qu'eHrecibirás

te yo algunas reflexiones morales acer- en aquel dia feliz que bajará delcie-

ca esa época memorable de tu infan- lo obediente'á las palabras" del sacer-

cia, como asi mismo advertirte de los dote; á ese Niño*, que hombre, mas

peligros que amenazan tu porvenir los tarde, por el curso delos tiempos, lle-

enemigos detu alma. vó una vida deprivaciones y sacrificios

Si, Luisa mia, si;laFé católica, fun- por la humanidad, hasta morir por ella
dada enla infalible palabra de Dios, en cruento sacrificio. Sufrió todaslas
nos enseña que Jesucristo está real y penalidades que puedes imaginar,pa-
verdaderamente en la Hostia Santa, y deció todos los tormentos de la cruel-
si velado bajo las especies sacramenta- dad mas refinada,y enla noche misma
les, nuestra vista corporal nole descu- que precedió á suPasión, nos legó, en
bre, noobstante, entoda ella reside la testamento su adorable Corazón, insti-
Magestad del Señor, con todo su cuer- tuyendo al efecto la sagrada Eucaristía.
po, alma y divinidad como está en los ¡Que*dicha para tí en tan feliz momen-
cielos. Es el misterio masgrande de tof Todo uncieloise hospedará entu
amor, es el dogma sobre el cual des- corazón, para ser morada dela Trini-
'. cansa la perpetuidad de la Iglesia, al dad augusta! Con que reverencia ypu-
cual debes profesar firme creencia y reza nohas de acercarte ér^ ese celestial