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ELLLORETENSE

    —Pero..: ¿qué pienso?... Á'iin tiene vida; luego                             Correspondencia particular de «EL LLORETEKSE:»
aun teng-o esperanza.... Iré á orar por él... Si vive

hará rai ventura... Si muere... cúmplase la volun-

tad de Dios.                                                                                              Cárdenas, 24 Julio de 1885.

•             •• ',•• '  " XVII.-;.         / • . • • • • • -••••••••                  Sr. Director de E L LLORETENSE.

   Cuando bajó Margarita,-al aposento en qué' vi-                                     Muy Sr. mió: Anteayer se desarrolló con violen-
                                                                                 cia extraordinaria un horroroso incendio en esta ciu-
mos la reunión de invitados, vio solamente en él á                               dad. Serian las 7 y media de la noche cuando anun-
                                                                                 ciaron las campanas, cornetas y pitos de la policía
los amigos mas allegados, que, interesados en la                                 que estaba ardiendo el taller de tonelería de los seño-
                                                                                 res Arrechabala y C." El viento reinante del Este a u -
suerte de aquella,.y movidos por un sentimiento de                               mentando en fuerza ponía en peligro muchas propie-
                                                                                 dades. A las 8 y media continuaba el fuego tomando
compasión hacia Enrique, querían acompañar á su                                  mas incremento. A las 9 y media era tan soberbio el
                                                                                 incendio que era imposible describir el torible espec-
amiga en la triste plegaria. • ; - . i..-;, ;v v                                 táculo que presentaba la estensión de seis manzanas
    Era ya entrado el dia, cuando Margarita, suma-                               (equivalente á unos 500 metros de largo por 110 de
                                                                                 ancho) invadidas por el fuego.
dre y las pocas personas que las acompañaban, sa-
                                                                                      Se quemaron dos almacenes de J. Muro, dos de
lían con dirección a l a Parroquia. .-•-_. :.                                    Arrechabala, la tonolería de Ferro y C.\ tres alma-
    El templo estaba solitario, penetrando la blanca                             cenes y un alambique de la Vda. de Zulueta y un al-
                                                                                 macén de tonelería de Fantoni y C*
luz de la mañana á través de las ventanas quese
                                                                                     El cuerpo de Bomberos trabajó pero sus esfuerzos
abren en.lo alto de la nave.                                                     se estrellaron ante la potencia del incencio y la falla
                                                                                 de recursos con que cuenta el referido cuerpo.
   En uno de los altares lucían hermosos ramos y

ricos adornos. Era el preparado para la ceremcnia

nupcial de Margarita y de Fernando.

   Esta dirigió allí sus pasos y cayó de rodillas an

te una sagrada imagen.

   —Este era, se dijo interiormente, el altar desti-

nado á santificar mi enlace con Fernando. En él se

une pues mi mente y mi corazón al afecto de quien

me ama... ¡Oh Dios mió, ya veis mi ansiedad y mi

zozobra!... Conceded á Enrique la salud si lecon-                                Se calculan las pérdidas en 800,000 pesos oro, por

viene, y si no..... hágase vuestra divina voluntad. todo.

Soy vuestra sierva y me resigno aVos.                                            En mieles y azucares unos 300.000 pesos.

    Todo esto lo profirió Margarita vertiendo llanto                             Desgracias personales no hubo que lamentar nin-
y en medio del mas grave silencio, al fin del cual
se oyó el lúgubre tañer de las campanas que dobla-                               guna.          • • • •.   ...
ban á muerto. l •• ••• -'i: •••'.•• ' ' ....
                                                                                 En cinco compañías aseguradoras y entre varias
    Un terror-misterioso se apoderó' dé Margarita
que pálida, convulsa, marcándose en sus ojos el                                  habia aseguradas las cortas cantidades de 140,680 du-
pánico mas espantoso, se volvió á los acompañan-
tes como interrogando á todos.                                                   ros en oro. "     :•:•'"

   —¡Por él... por él... ¡Diosmio!..; escíamó. ••'••                             • • La catástrofe ha sido terrible; tarde podrán recu-
   Quiso levantarse, pero las fuerzas la. abandona-
                                                                                 perarse tantas pérdidas y capitales desaparecidos en

                                                                                 tan pocas horas.

                                                                                 De V. Sr. Director, atento s. s. q. b- s. m.

                                                                                                           SALVADOR VIDAL.

ron. Corrió su madre á sostenerla, recibiéndola sin
                                                                 • •• :
sentido entre sus brazos.                                                                       COMUNICADO.

   En efecto, Enrique habia espirado!.,.

                    :. • • X V I I I . • •  : - \ '• •••:••••'•  ••• '•••••  '•  ,. : ... ,,              . Lloret 5 do Agosto 1885.

   Lejos del teatro en que tuvieron lugar los suce-                              Sr. Director de EL LLOIUJTF.NSE.

sos que acabamos de referir, y en lo mas áspero de

la sierra se levanta un monasterio de religiosas;                                    Muy Sr. mío:Aún resonaban agradablemente en mi
                                                                                 oído las armoniosas notas de las dos magníficas bandas
   Hay una entre todas que descuella en fervor y                                 de música que hemos tenido durante la fiesta mayor; aún
                                                                                 me parecía ver el inmenso gentío que en nuestra hermo-
en devoción, sugetando su cuerpo al rigor del sili-
                                                                         :
cio y del ayuno mas severo.

   Es Margarita. •       • : • • • • • ' • .••• •                        . • • sa playa se agrupaba para ver cual soría el bote afortu-

   Su corazón ñor sin aroma en el jardín de la exis-                             nado que ganara la tradicional llelliquia; sentía aún la
                                                                                 dulcísima impresión que debe nolar todo aquel nuo cual
tencia, maltratada por la tiranía del infortunio, per-                           yo alojado do este querido suelo duranto una larga serio
                                                                                 do años tiene la inmensa dicha do podor gozar de loiios
dió una por una las hojas de sus encantos.                                       los placeres quo nuestra fle»la mayor proporciona, cuan-
                                                                                 do llega á mis manos ese bi-semanario que V. dirige y
   Corazón nacido para amar con la pasión mas                                     onJa avidez, del que quiere gozar nuevas impresiones
                                                                                 doloitándose con la loclura. do minuciosos pormenores
pura y delicada al hombre de sus ensueños, riopo-

dia encontrar sobre la tierra otro objeto en que po-

sarse.                   : • • : : - ...:!-v.- . ,i¡. :. ...¡

   Enrique habia muerto en el mundo y para el relativos á dicha fiesta, detengo mis posquisas en el co-

mundo quería morir también Margarita meditando municado firmado R. N. porque esceptuando algunas fra-

en la soledad del claustro, lo efímero de nuestra ses relatando como estuvo la llelliquia, no cncueniro ab-
existencia y lo grandioso é inconmensurable déla solutamente nada, que mo proporcione lo quo deseaba.
                                                                                 Ignoro quien es ol autor de dicho comunicado, poroso
Eternidad.    . . . . . , . • . . . . . . • •.: ,. .

                         EDUARDO SAINZ NOGUERA.
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