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POESIA
LETRAY EPIRITU DE CARMEN NONELL
Nacida en Barcelona, de la prestigio-
sa família Nonell, oriünda dj nuestra
villa. vecina actualmente de Madrid, el
recuerdo de Lloret de Mar se mantienc
muy vivo en su interior, y se siente muy
cerca de nosotros.
Su carrera literària ha sido ràpida y
briliante. Sus novelas. poemas, conferen-
cias y colaboraciones de prensa en im-
portantes diarios y revistas de Espana.
Francia. Alemania y Sudamérica, reve-
lan un espíritu abierto y completísimo,
capaz de cultivar con talento y agudeza
nada comunes, los generós mas diversos.
El critico José Luis Cano ha dícho d^
ella que «es una de nuestras escritoras
mas inquietas y méjor preparadas». En
1935 obtuvQ el premio de Novela Corta
de la Delegación de Cultura y Editorial
Mateu de Barcelona, y en 1955 le fue
adjudicado el Premio «Fémina» de No-
vela por Zoco Grande de ambiente ma
rroquí. En su última novela «Munich.
Leopoldstrasse. 207», obra de crudos y
rcalistas acentos, novela catòlica según
los discutides conceptos cuyos caminos
marcaron Daniel Rops, Bernanos, Gra-
ham Greene y otros, nuestra autora des-
arrolla una atrevida tesis que la coloca
dcntro de los amplios cànones de la mo-
derna novelística europea.
«TRAMUNTANA» se honra hoy aco-
glcndo en sus pàginas una de sus poesías
qwz lleva en su entrana el paisaje y la
nostàlgia de Lloret.
B-
poema mediterràneo
E] (•o.·;iillaje rendida en e! noclurno csfuerzo.
-. — pexca con li/z de luna y f>(i.\{>lina —
xohre la arena hlanda. la siesia
de lax barcas de alia proa latina.
Un ejército de jineies blancos
en los múltiples lomos del gran corcel del mar.
Fosforescència en plaïa. Y un lejano
tremolo — Sinfonía de claros adioses —
en el conf'm pastoso de cobalios.
Compàs de tres por cuatro: ^avoia
rítmica de una única gavioia.
Un grunu dorado y esíridenie de sol mediterràneo.
Laurelcs, mirlos, bojes recorlados.
Ravel pagano. coronado de pàmpartos:
«.Dafnis y Cloe» en marco de luz grecorromana.
.. .Fué ast... El trempo
detenido, nos encerró en su anillo. Un instante
derivaran, unidas. nuestras vidas.
Minuta eterna. Eternidad fugaz.
iPor qué no pudo florecer cl milagro
de detenerse el tiempo etcrnamente?
Fundirse en la violència de la luz laíina.
el sol y ei mar. La Sinfonía
de velerox lejanos y corceles. Y el ala
de la gavioia rezagada.
El boj, el mino y las proas altivas.
^Dafnis y Cloe». Y tú. Y yo. Parados
en el redondo anillo
de la ficsta pagana del sol mediterràneo.