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PERIÓDICO CIENTÍFICO, LITERARIO Y DE INTERESES GENERALES.

                                               ieeuse c a d a xlas domingos.""" '*<-'

                                               fI    • •• . '•-——                :

Alo I.                Suscrlclón.              Uorel íe Mar 12fleAbril 4e 1885.          ;• Advertencias.                    .Mm8.

        'Ea lloret tres mes63. . . 1 ?es«ta                                         I«s üuscrioiones j aiunoioi se pagan
        En UPenínsula tros id. , i'25 »                                          por adelantado pudioudo efectuarlo los
        Extrtngcroj Ultramar laño 10 >                                           señores residente luorft de Uoret, en
                                                                                 sellos ¿9 Correos y lotr&a do faoil cobro.
           Aaaiioios ¿rreoios convencionales.

                                                     el diccionario de la lengua (cruzamiento de

                                                     castas) moderna en el diccionario político.

                                                     También hemos merecido este indefinido y

        en el siglo presente, eD oscuro anatema, hoy muy en boga entre los
        .un mundo falaz, en elque domina defensores de cierta idea política. En nues-
        el caos político, esto es, la farsa, tras nianos aún laSagrada Biblia, con moti-
la ambición, elengaño, miserias por todas vo de nuestro artículo anterior, no hemos sa-
partes, cuyos cimientos es lapolítica y cuyo í'Bidó.encontrar en ninguna de sus páginas, un
                                                      solo acto belicoso del Divino Salvador, de Él
pedestal es la idea, en sus diferentes ramas;        1 que con tanta humildad atraía y regeneraba
no podemos pasar por más tiempo en silen-
cio, ya que continuamente aludidos* hemos á aquellos corazones, impuros, por el vicio y
de sufrir épJQ resignación los diferentes cali- lacoríyupeióh. No, y mil veces no, la religión
iat¿vosíWqüe hoy se valen los políticos, católica na puede ser nunca escudo ni panta-
para motejar al que no está afiliado á cual- lla de ambiciones políticas; es muy grande,
                                               ;¿ .  es un colosal gigan'l^ryia poética ambicio-
quiera de sus. ideales.
Librepensadores nosllainaii. Germinó sa es un débil pígñífo, que en vano se e s -
nuestra existencia con la cristalina savia de fuerzíí. para cojromper las^f purísimas y cris-
las aguas del Bautismo, crecimos con•;• aquel talinas aguas de su dulce manantial.

jugo católico, y nos ed|^^&ps en Jas puras           Ni queremos ni sabemos ser políticos; dé-

creencias de nuestra sacf%M¥ta Religión". Al jese esto para los que deseen med rar ó figu-

tener razón de lo que éramos^ nos hallamos rar en elcampo de agutinante de nuestro si-

en una Babel" de ideas incomprensibles; los glo actual, ó á los qütjensus bellas ilusio-

unos se llamaban progresistas, los otros con- nes, esperan como al "Mesías, al que ha de

servadores, otros demócratas, otros republi- venir si redimir, á los cautivos de su ideal

canos, otros carlistas, y dentro de.estos •mis- político.                           ;.

mos grupos, había aún otras fracciones; nos •No, ignoramos que nuestra bodestap u -
asustó esta borrasca política y no hallamos blicación causa hastio á unos, otros la en-
ningún inconveniente en calificar estas agru- cuentran monótona; lo sentimos, pues nues-
paciones'veleidosas, de calamidad nacional. tra intención es muy distinta; que no nos
Ni en nuestro modo do ser, ni en nuestro mo- lean, & lus que esto les suceda; en cambio
do de pensar, hemos variado de ayer á hoy; nos anima que personas ilustradas, imparcia-
nuestra bandera ostenta los lemas del catoli-, éiales, ydespojadas de color político, no solo
cismo puro; sin mistificaciones do ninguna nos animan en. nuestra pobre publicación, si
clase, yllevando por remate, abrasado al sig- qjje tumbión nos ofrecen su peculio para sos •
no de redención, elsímbolo de la caridad y tenerla. ;
amor ánuestros semejantes; aunque disien-
                                                     Creemos seguir un buen derrotero, y no
tan estos de nosotros en ideas secundarias. , deseamos meternos en • un laberinto, al en-
Dicen somos mestizos. Palabra añeja en trar en otro sembrado de abrojos y espinas.
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