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Para comprenderla fecundidad del entendimien- productiva para sus autores sino que además se-
rá forzoso sostenerla á espensas de nuestro pe-
to humano en nuestros días, y con ello lo im- culio, sin olvidar tampoco que intentamos reco-
rrer un camino que se halla, de espinas, algo
prescindible de que nadie ignore los principios erizado. Nos anima más alto fin; más levantado
es el móvil que nos guía: pretendemos contri-
generales de la Ciencia, basta observar única- buir con la medida de nuestras fuerzas al fo-
mento y desarrollo de los intereses de esta villa,
mente: que concretándonos & un solo ramo cien- hoy más que nunca amenazados, á causa de la
decadencia de la marina y de la crisis económi-
tífico, la Física, por ejemplo, y fijando nuestra ca, tan difícil de resolver, porque la Isla do Cu-
ba atraviesa; somos amantes de la instrucción,
atención en el corto período de los últimos ocho y queremos difundirla entre todas las clases del
pueblo, para que en día no lejano, recoja sus
años, sin contar aun con numerosos descubri- frutos bíenechores; sentimos cariño especial por
esta villa, y sobre desear su prosperidad más
mientos poco menos importantes, Graham Bell completa, anhelamos verla honrada con la ilus-
tración y actividad de sus hijos.
inventando el teléfono, nos ha dado el medio de
Lloret de Mar l.° Enero 1885.
comunicarnos desde considerables distanciascon
• LA REDACCIÓN.
nuestros semejantes, haciéndonos percibir su
LA CHISPA ELÉCTRICA.
propia voz, con la rapidez asombrosa del fluido
El estudio de la electricidad ofrece á las inves-
eléctrico; Edison, con su fonógrafo, nos ha ense- tigaciones de lacienciaun anchuroso campo sem-
brado de maravillas de gran interés, en donde se
ñado á recoger y atesorar para reproducirá vo- hallan infinitas cuestiones de verdadera utilidad,
si bien, desgraciadamente muchas h.iy por resol-
luntad nuestra, los variados tonos de una melo- ver á pesar de los concienzudos trabajos de los
que;') esta rama del saber humano se dedican.
día y lo fugaz de la palabra humana, con el tim- Es, por otra parte, ciencia que puede llamarse
con razón, de origen relativamente moderno;
bre y modulaciones del orador; se ha descubier- pues los antiguos no conocieron de ella sino he-
chos aislados, sin enlace de ninguna especie, y
to la divisibilidad de la luz eléctrica, y ciudades las consecuencias que deducían estaban por de-
más subordinadas al espíritu de escuela en que
populosas y centros industriales aparecen alum- cada uno militaba; baste por ejemplo, indicar
como prueba de lo dicho, que en la escuela Jó-
brados de noche con esta luz vivísima y radian- nica, en la'que el movimiento y el alma se con-
sideraban idénticos, juzgaban al ámbar gris co-
te; y á juzgar por los ensayos que acaban de ve- mo animado, por lo solo acción del frotamiento,
puesto que como sabemos, por este hecho ad-
rificarse en Francia, ha sido resuelto el proble- quiere la propiedad de atraer los cuerpos lige-
ros; fenómeno que Thalés de MiJeto fue el pri-
ma de la navegación aérea, sobre cuya solución mero en indicar, unos seis siglos antes de la Era
Cristiana.
se venía trabajando desde hace un siglo inútil—
Algunas otras sustancias mencionaron así mis-
. mente. .• mo los antiguos como dotadas de la misma pro-
piedad, tales como el ¿gata, la turmalina, etc.,
Siguiendo la-costumbre de los demás perió- pero á esta sola indicación se redujo su conoci-
dicos de esta clase, publicaremos poesías de di- miento científico en el orden de .fenómenos de
verso género, algo de novela moral é instructi- que se trata; considerando como de origen per-
va y otros escritos de puro carácter literario. fectamente distinto las sacudidas que producen
Grande es la afición que se tiene en nuestros ciertos peces como los torpedos y gym notos, las
días por la literatura, efecto debido á la facili-
dad con que la imprenta difúndelas ideas y sen-
timientos. Ved sino la profusión de libros y artí-
culos publicados sobre este ramo especial en los
últimos años transcurridos. Como si se hallasen
agotadas las fuentes naturales de su inspiración,
se escriben poemas aun sobre lo abstruso de la
Ciencia y sus aplicaciones; y las obras de Ver-
ne, Reid, Aymar y otros eruditos que tanta acep-
tación han merecido, nos demuestran que ha in-
vadido el mismo campo la novela, hermanando
la razón y el sentimiento. Hasta los periódicos
más ágenos á esta materia, como son los políti-
cos, se ocupan de ella frecuentemente. Y cuan-
do todo esto sucede y se observa ¿cómo prescin-
dir tratar de literatura en estas páginas?
• Y por último una sección de variedades con-
tendrá las noticias curiosas é interesantes que
se encuentran en libros y revistas, ¿il objeto de
dará este trabajo mayor amenidad.
Tal es la índole dol periódico que presenta-
mos á la benevolencia de los lloretenscs. Al pu-
blicarlo no mueve nuestros pasos el propósito de
lucro, ni pretendemos para nosotros ninguna
otra utilidad. Sabíamos de antemano que no so-
lamente vamos á realizar una.obra de suyo im-
