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DEMASIADOS «TÉCNICOS»
No creíamos, en verdad, que a tas dispuestos siempre a la polémi- sabiendo chutar con ambos pies, co'
\ peaffr del ayuno forzado de siete a- mo base principal, puede Jugar indis-
iños (casi siete siglos para el afício- ca y a pagar cafés, copas y puros, tintamente en cualquier lugar del
' nadf» de corazón) sin fútbol, ni cam- equipo como Jugador tcomodfn», o
se lo hubiesen creído? Pues es así. que se adapta a todo. Cuan felices
pa,-ai equipo... ni nada relacionado serían los entrenadores si todos sus
• con él deporte, surgiera tan potente Donde hay un corro de jóvenes o jugadores valiesen para los distintos
y a.rrolladora esa legión de seguido- puestos del equipo. /Cuantos que-
mayores, se habla sólo de fútbol lo- braderos de cabeza se ahorrarían!
res incondicionales de las azuladas
camisolas de nuestros jugadores, cal, ya sean masculinos o femeninos Se han enterado Vds. alguna vez,
tamateurs* puros cien por cien, (ú- si han protestado Arcas, Tejedor o
nica fonna como querríamos ver in- sus componentes. Y, como no, por César, pongo por caso, de que les
1 terpretado el fútbol y todos los de- hayan colocado de defensas, volan-
^•pories)., muatiachos que estén dando t Canaletas' de Lloret y sus alrede- tes o delanteros? Disciplina, por fa-
f en cada actuación suya, se gane o vor, mucha disciplina para saber
; ito. una, demostración de como se dores, han surgido técnicos futbolís- acatar las órdenes y comprender los
' lo^C^ <iue la afición local crezca a buenos consejos, pues si se vé que
'•ojos vistas y les aliente sin tasa, pa- ticos en cantidades francamente hay alguna de aquellas equivocada,
ra corresponder asi a los que en el se rectifica sin vacilar, que por algo
~ campo hacen todo lo que pueden y asombrosas, caso que podría tomar- somos humanos y no infalibles.
sab^n para quedar bien.
se como motivo interesante de curio- Así están las cosas por aquí y no
No se puede pedir más después puedo dejar de aconsejar a loé Juga-
de tan largo paréntesis de inactivi- sidad, si sólo se tratara de comenta- dores, que portándose como real-
dad, pues contando con muy buenos mente son, o sea modestos elementos
elementos en el primer equipo, hay ristas nacidosal calorde unos corros de un equipo de aficionados, hagan
por.añadídurj un plantel de juveni- oídos 'sordos a las malévolas insi-
les que también lo dá todo en cada callejeros con sanas Intenciones, que nuaciones de todos los que parece
encuentro, don Je se forjan las hoy les quieren bien y en realidad les ha-
día promesas, que se transformarán normalmente se forman los domin- cen daño, mucho más daño de lo que
muy pronto en realidades. Vpor qué ellos creen. Es lógico y normal este
na hablar de los chavales de 10 a 12 gos al atardecer. Pero ya sea por caldeamiento presente de la opinión
años? ifn sinfín de equipos brota a futbolística local ante la realidad de
lo largo de nuestras calles y no hay falta de costumbre, por exceso de un espléndido campo de deportes y
tarde en la que r.o se vea p,irtido de unos muy logrados equipos. Pero,
infantiles en el Campo de Deportes, celo o por creerse verdaderamente paciencia amigos. Los que van Junto
Los 'equipos» del «Venecia^, <La a los equipos en sus desplazamien-
Riera*, C. de F. 'Marina' y <Dalt enterados del asunto, están arman- tos a campos forasteros, se dan aho-
del Puig* compiten sin tregua en el ra cuenta y aprecian en lo que vale
campo... y donde hay unos metros do unos jaleos, trastornando opinio- nuestro Campo Municipal de Depor-
de terrerió libre y algo parecido a tes por las perfectas condiciones de
una pelota. nes que nadie ha dado y creando su terreno de juego e instalaciones,
al compararlas con las defícientes o
y del ambiente creado alrededor unos problemas entre los jugadores, inexistentes de campos ajenos. El
de todo e^to, ¿qué tne dicen Vds.? logro de lo que ahora disfrutamos,
Si hac^ solamente un año les hubie- quesólopueden llevara la confusión costó aquí mucha paciencia, mucho
sen contado que en Lloret ahora no esfuerzo y una voluntad a prueba de
merecían casi comentarios los par- y al malestar entre todos ellos.
tidos de fútbol de 1." división de disgustos y slnaahores. Pero una vo-
l.igíi, con españolistas y harcelonls- Menos mal que me dicen que la
Junta Directiva del Club, ha tomado
cartas en el asunto y las aguas han
vuelto al buen cauce.
No comprenden estos aficionados
que lo que sólo lograrán será la des-
unión entre unos compañeros de
fuego, que en el campo y también
fuera de él no deben ser once hom-
bres reunidos al azar, sino un armó-
nico grupo en el que Jueguen y ac-
túen el uno para el otro y todos para
el conjunto, respetándose y ayudán-
dose mutuamente. Que sepan ver
también estos <¡técnicos> que tienen
* vista' de sobra para sentenciar sí
un jugador debe jugaren este o aquel
puesto, y que además les matacon-
sejan que se rebelen si les cambian
de lugar, que en un equipo de fútbol
no hay ningún lugar Inferior a otro,
y que afortunado el jugador que
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