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EL PORVENIR

jóvenes y han envejecido para hacernos hom-                 festó a sumarido, i quión hubiera dado todo lo que       la pasión que me arrebata,
bres. .                                                     tenia en el mundo detenerlo, expresándole entonces       por lo tanto, buen amigo,
                                                            que dependía enteramente de la munificencia de sus       yo siempre diré en voz alta
   Nada más por hoy; consérvese bien señor                  tíos por haber quedado á la vez huérfana y pobre.        que prefiero ojos azules
Director y hasta la próxima. Se despide su

afectísimo.—SAN PEDRO.                                      La posición delos recién casados resultaba critica       porque son los de mi amada.

                                                            y algo había que hacer, pues que con amor sólo no                                     LEOPOLDO.
                                                            se vive, y mucho menos se pagan deudas y no era
geccion Oficial                                             fácil contar con los tíos entan especial situación, ni Barcelona 24 Agosto de 1896.

                                                            justificar susingular procedimiento. Y asídecidieron

Adntlatetrmtlén de Carreo* y Kululta de ser lo mejor, por doloroso que les fuera, dar por nulo

telégrafos de Llarrt de Mar                                 lo hecho, y ya que nadie era conocedor de lopasado,      ¡¡ADIÓSH

  Btlacitm de Uu caria» detenida! por deiconocer d          volverse Constancia á Gloncestenhire con sus tíos                      I
«tu riettimifnrto».                                         como electivamente lo hizo, y allí encontrándose con
                                                            Me. Watkins, rendirse á las instancias de su buena          Desde lacumbre
    De U o r a de Mar (devuelta de Mataró, i dofia          tía, y al hacer al banquero antes de un mes, el más      tímida el alba
Dolores Bcñx, caite del Bto. Salvador, n.* n .              feliz delos mortales otorgándole sublanca mano, y        borda los cielos
                                                            jurando ante el altar (no sin llevar el blanco velo yel  de oro y denácar.
    Lloret de Mar 26 de Agosto de 1896.—El Admi-

nistrador, tí. Montenegro.                                  simbólico ramo), ser suya para siempre hasta quela         Inquieto el aire
                                                            muerte los separará.                                     mece las ramas,

     Amenidades                                             Haroldo cuando esto acaecía, cruzaba el Medite-                       y alegre corre
                                                                                                                                  cantando el agua.
               UN PARECIDO                                  rráneo en un vapor de la Compañía Peninsular y
                                                                                                                                      Las flores abren
ABSBGLO DEL 1MGL¿S DE F. C. PHUXIPS                         Oriental destinado al ejército dela India, donde con                  sus hojas castas,
        fffl» Himtra eoUhormúlm particular)                                                                                       las ramas tienden,
                                                            menos gasto y más sueldo pudo en tres ó cuatro arios                  las frentes alzan.

                                                            solventar sus apuros, y quedar enpaz con sus acree-                        Y det rodo
                                                                                                                                  de la mañana
                                                            dores.
                                                                                                                              doble corola debrillantes perlas
                                                                            • **                                                • muestran ufanas.

                                                                     Diez anos después, el Coronel Trevelyan (queya                              II
                         H. lo era) regresaba á Europa, y pororden del médico
                                                                                                                                      La tarde espira,
¡Comluríónj                                                 salía para Mentona. Un día en Monte Cario ¡á quién                     la luz se apaga,
                                                                                                                                  y enluta el monte
                                                            había de encontrar sino á Mr. Watkins y ásu esposa!,                   la sombra vaga.
El pian de Miss Grey fuillevado á cabo tal como y aun que el encuentro fue casi tete á tete una signi-
se proyectó en lorelativo al matrimonio. Trevelyan ficativa mirada de la última, previno toda clase de                                £1 aire triste
obtuvo los papeles necesarios,. unque para ello tuvo reconocimiento mutuo.                                                         gime enlas ramas
que jurar en falso sobre la edad de Constancia á la                                                                                y entre las piedras
que agregó dos arios, pero alfinel pecado no era tan            Algunos días después paseando Mr. Watkins con                     solloza el agua.
grande considerando que la intención era buena, yel         un bolsista amigo suyo que había venido i pasar unas
fin justifica los medios. Nadie seenteró pues, se casa-     vacaciones bien ganadas tras los quehaceres del atlo,                     Cierran las flores
ron en tota iglesia sin importancia, con solos dos tes-     volvió i encontrarse con el Coronel enel camino de                     sus hojas pálidas,
tigos c o g a o s al azar por el sacristán, que niconocían  Mentona a Monte Cario.                                                los tallos doblan,
                                                                                                                                   las frentes b*jan.
i los desposados ni habían de acordarse de ellos,           «Se ha lijado V. enese caballero que pasa,» pre-
                                                                                                                                      Y esel rocío
como tampoco los conocían el ministro ni el sacris- guntó el bolsista i Watkins. Parece militar. Por cierto,                       que las esmalta
tía, atentas tan solo á cobrar honradamente los ho- ¿no ha reparado V. que parecido más asombroso tiene
                                                            con suhijo mayor, con Haroldo? ¿Qué es por casua-               el llanto con que lloran afligidas
norarios d e sutrabajo.                                                                                                            sus mustias gal*s.
                                                            lidad hermano ó pariente de su esposa?
  , Y así sio saberlo nadie, fuero» Haroldo y Cons-                                                                                        , III
tancia marido y mujer durante diez días, ávidos solo           Nó, parentesco ninguno, nisiquiera loconocemos.
de disfrutar su luna de miel, procurando eludir todo        Lo hevisto algunas veces y también he notado que                          (Como á las pobres flores
conocimiento y toda relación, que así eselverdadero         mi hijo se le da un aire, aunque esmuy poca la seme-                   le sucedió i mi alma
amor aficionado al misterio y á la soledad, ya que          janza. Pero esas cosas son meros accidentes. Mi her-              bafiada en los límpidos colores
para los emamorados el universo está constituido por        mana Isabel, ya la conoce V., la casada con misocio                    de la tranquila calma.
ellos m i s ó o s , y todo lo que pasa á su alrededor, no   mandable, tiene un hijo que es el vivo retrato de
solo carece de importancia, sino que aún mis parece         Mr. Bounderwcll, el pastor de la Iglesia á que ella vá,                   Sintió la vez divina
venir 4 perturbar el tranquilo disfrute de su felicidad.    y sin embargo ni ella ni su marido son parientesde                     con que, tiempo ha, soñaba
                                                            él, ni tienen con él relación de amistad ni conoci-               jera el amor dela preciosa nifta
Pera al cabo de los diez días, y antes de que los miento personal ninguno. En fin, nisiquiera Mandable                             que el alma adivinaba!
tíos de Constancia sospecharan siquiera la escapada de va á la iglesia de Bounderwell, sino que atiende á
SD sobrina, y el haberse convertido ésta en capitana otra capilla dediferente pastor.                                                 Ese amor fue laaurora
de Húsares, unacreedor inoportuno vino i turbarla                                                                                  de la rn.ifl.ina,
                                                                                                       X. X.                       y desde entonces mialma,
tranquilidad del matrimonio y á deshacer aquel idilio                                                                              como las pobres flores,
                                                                                                                                   mostróse ufana.
tan poéticamente comenzado, sibien justo es confesar
                                                                                                                                                 IV
ea honor suyo, que detodo esto no tuvo ni la más                    §}ección recreafiua
remota intención, siendo la suya y única cobrar lo                                                                                    ¡Como á las pobres flores
                                                                                                                                   le sucedió á mialma
que Haroldo le debía, con los intereses al ciento por                                                                    cuando iba á mecerse en sus amores...
                                                                                                                                   pierde la calma!
ciento.                                                             OJOS AZULES
    Hay <(ae advertir que aunque Haroldo Trevelyan                                                                                    (Pierde la voz divina
                                                                                                                                   con que, tiempo lu, soñaba
estaba enamoradísimo deConstancia, y las prendas                      A MI BUEN AMIGO PEPE VILA                          (Pues he perdido aquella hermosa nifta
físicas y morales de ésta no eran para menos, no ha-                                                                               que yael alma adoraba!
bía dejada d e influir en su matrimonio la circunstancia               Los ojos azules, Pepe
de hallarse acribillado de demias, y como buen inglés               son los ojos que me agradan,                                      Y cual la sombra oscura
considerar contó enemigos temibles únicamente á los                 porque tan sólo ellos saben                                    la tarde Viste
ingleses; y i la par la ¡dea que tenía formada de la                reflejar laardiente llama                                      esa ausencia á mialma
fortuna de Constancia, idea desgraciadamente equivo-                del amor puro é inmenso                                        como a las pobres flores
cada, ya «pie se basaba únicamente en la apariencia                 que nuestros pechos inflama.                                   ¡¡la dejó tristel!
que le prestaba la fortuna desus tíos los Fetz James.
Y no hajr <|ue criticar á Trevelyan por ello, pues no                  Ojos azules, Vilá,                                                                      L. C. S.
se quien sera, el que considere menos digna desu                    me seducen, me arrebatan,                        Lloret, agosto 1896.
amor a una muchacha bonita, por el mero hecho de                    porque es el color, amigo
                                                                    de los ojos demi amada.

Mr ella rica, y tener deudase l .                                                                                    SOLUCIONES DEL NUMERO ANTERIOR

    Así fue que presentada por e! acreedor su reclama-                 Podran ser los ojos verdes                    De los secretos portentosos:
ción, y no teniendo conque satisfacerla Haroldo, di-                la ilusión y la esperanza,                            I." Nacer ciego
rigióse carao era natural asu bella mitad, (ya queen                ardientes los ojos nebros,                           a.° Noser empleado nunca.
rigor no podía llamarla cara, pues muy poco lehabla                 muy bellos los ojos pardos,                          3.° Guardarlas cuidadosamente enuna caja.
Costado hasta el presente), ensolicitud deun presta*                pero enningunos encuentro
mo de quinientas libras por tm mes ó dos. Desgracia-                al par que expresiones lánguidas,                Del enigma: Cortiva.

                                                                                                                     De la charada: Cansalada.
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