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REVlSTA MORAL.- CATÓLICA. ·CIENTÍFICA Y LITERARIA.

PUBLÍoASE OADA DOS :IlO?i!mGOS.

                          SUSORICIÓN:                                       ~

E$palla, sel~ meses, ~ pesetas.-E~trangcro y Ultramar, un ano, 10 posetas.

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 EDUCACIÓN DE LA MUGER.
                                           rias y desdi..:has , y de cuanto encierra
   La educación de la mujer debiera
~er el gran pensamiento en q ue más        de venerando un pueblo en. religió n ,
fijaran su atendón los hombres de go-      costumbres, leyes y civilización? In-
bierno. Receptáculo moral de la espe-      dudablemente que sí, y si tan impor-
cie humana. en cuyo seno , segun Cor-      tante es su papel en la historia de la
menin, lleva encerrado el porvenir de      humanidad, ¿podrá desempeñarlo dig-
las sociedades; ¿será de menor impor-      namente, sin antes haber recibido una
tancia social su m isión que la del hom-   preparación que Ja haga digna de tan
bre, ella cu ya influencia en sus desti-   grande minister:o?
nos es innegable, como nos lo confir-
ma en sus pági nas la historia de todos       Es predso reconocer, empero, que
las edades?                                la atmósfera social no está muy á propó-
                                           sito para formar el carácter de la mujer,
   Gran parte toma la mujer en la edu-     y dirigir, con ac_ierto, sus sentimientos.
                                           Por eso siempre que se h abl~ de s u
cnción del hombre y en el porvenir de      ed ucación nues~ro ánimo se sobresalta,
                                           y creemos que un plan completo de
los pueblos. Aunque instrumento, en        educación no puede formularse en
apariencia débil, para contribuir co n     nu estros tiempos, si todo cua nto moral-
sus fuerzas á la formación de su carác-    mente la rodea, no secunda los prin-
ter y á la perfección de sus costumbres,   cipios en que debiera aquella descansar
es si n embargo evidente. que desde        para ser pura, sólida y cristiana. Sin
una esfera humilde y desconocida. pre-     embargo, mucho puede prometerse la
pnra y elabora el gérmen vital, del        fami lia de Ja mujer, y la sociedad mis-
cual hunde nacer todos los elementos       ma recogería sus frutos, si In acción
constitutivos de una nueva generación.     oficial, secu.ndada por los amantes de
                                           un a ciencia esccncialmente religio~n,
   La mujer es lu fumi lia. y la familia   desarrollára una ley, cuyo espíritu fue-
es el afluente de l u sociedad, ¿no será,  se la sín tesis de la verdad y de Ja cien-
pues, l:i mujer participante de SL:s glo-
                                           cia.
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